La víctima dijo que este era el habitante de calle quien le habría propiciado la golpiza.
De acuerdo con declaraciones de Ana María Ramírez, “por los lados del Hospital el habitante de la calle me cogió la cola yo en medio de miedo y rabia lo manotee, y ¿qué gane por defenderme o no dejar que me manosearan?, una golpiza unas palabras groseras y como si fuera poco que me siguiera manoseando” dijo.
Al interponer el denuncio respectivo, las autoridades le informaron que el habitante de calle ha atacado a varias mujeres en Neiva, incluso pudo conocer que hace casi un año el hombre también atacó a una joven universitaria en el sector de Cándido, hecho que quedó grabado en video y causó repudio entre la comunidad. En esa oportunidad el hombre fué capturado atendido en el hospital como un paciente psiquiatrico y dejado en libertad, porque la victima no interpuso la denuncia respectiva.
Las autoridades que ya tienen identificado al agresor, hasta el momento no han logrado capturarlo.
“A través de mi Facebook una mujer me escribió que hacía tres años había sido víctima del sujeto señalado. Que en esa ocasión ella fue violentad y que el sujeto le intentó quitar el pantalón y hasta se masturbó delante de ella”, narró Ana María.
Por su parte el subcomandante de la Policía Metropolitana coronel Héctor Ruiz, indicó que “en este momento estamos realizando las investigaciones pertinentes para hallar el sujeto, ya contamos con la denuncia oficial, y necesitamos dar captura del hombre que representa un peligro para nuestras mujeres, trabajamos en esto para de manera pronta dar resultados frente a este hecho”.
“Yo ya hice las respectivas denuncias, y espero realmente que esto no le pase a ninguna otra mujer; porque realmente ha sido muy difícil recuperarme, porque no son solo las heridas físicas, es el miedo de salir a la calle, cuesta retomar la normalidad de la vida”, expresó la joven de 20 años.
Sin embargo, la paradoja del caso de violencia contra la mujer, se convierte en una analogía, mientras Ana María y su familia se sobreponen de la situación, la joven que esperaba el apoyo de la comunidad, de más mujeres, pues lamentablemente ha sido victima de señalamientos, en los que otras mujeres dicen ser merecedora de lo que le sucedió.
“Me parece que es algo muy ignorante, y triste, sobre todo, hay mujeres que a través de comentario y mensajes internos me dicen que lo me lo merecía porque iba muy “mostrona”, que tal vez yo incité al sujeto, realmente aquí nos falta mucha humanización y solidaridad de la gente”, expresó Ana María.
Ana María dentro del proceso de recuperación emocional tuvo que cambiar de sitio de residencia, hoy vive entre el temor de salir a la calle y encontrarse nuevamente con su agresor; sin embargo, el apoyo de su familia y personas cercanas ha sido fundamental para afrontar lo sucedido.
Hoy solo espera que las autoridades puedan dar con la captura de aquel “loco” que ataca a las mujeres en Neiva, un sujeto que en su enfermedad mental se convierte en una amenaza, atacándolas, golpeándolas y abusando de ellas en su condición de indefensión como de mujeres.
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