Las campañas de sensibilización y las continuas operaciones adelantadas por los soldados de la Novena Brigada en el Huila y sus zonas limítrofes, llevaron a dos jóvenes a huir de los grupos armados organizados residuales que los reclutaron de manera forzosa y buscar el apoyo del Ejército para que les sean resarcidos sus derechos.
Los menores de 16 y 17 años, aseguraron haber pertenecido a los grupos armados organizados residuales, Dagoberto Ramos y compañía móvil Yeferson Martínez, comisión ‘Primo Rogle’, respectivamente; habrían recibido misiones como cobros extorsivos, inteligencia delictiva a la Fuerza Pública y transporte de material de intendencia.
Los menores expresaron estar cansados de los malos tratos, de no tener oportunidades de un mejor futuro y del temor de ser capturados durante el cumplimiento de las actividades ilícitas a las que eran obligados.
Una vez los jóvenes se presentaron a las tropas y expresaron su voluntad, fueron puestos a disposición de autoridad competente para el inicio de la ruta de atención y restablecimiento de derechos.